Hacia el año 1.550, el verdadero violín de cuatro cuerdas formaba parte de la escena musical; el instrumento y su afinación fueron descritos explícitamente por Jambe de Fer en su Epitome Musicale (Lyons, 1.556). Un violín de tres cuerdas, cuya afinación era la de las tres cuerdas más graves del verdadero violín, precedió al instrumento de cuatro cuerdas durante una generación y aparece representado hacia el año 1.508-9 en Ferrara, en las pinturas de la Escuela de Garofalo, y alrededor de 1.529-30 en la zona de Milán, en pinturas de Gaudenzio Ferrari. Casi en esta misma época existen referencias del violín en Francia y en Polonia, pero la preponderancia de pruebas señalan el norte de Italia como cuna del de la familia del violín, especialmente la zona o región de Milán (incluidas Brescia y Cremona) y Venecia. Los miembros graves de la familia (viola y violonchelo) aparecieron en 1.535 como muy tarde, como demuestra el fresco de Gaudenzio Ferrari en la cúpula de la catedral de Saronno. Igual que Jambe de Fer describía en su tratado de 1.556 el violín de cuatro cuerdas, la viola y el violonchelo como una familia, similarmente Gaudenzio, en 1.535, representa en un fresco de Saronno el violín y la viola de tres cuerdas (y un chelo en el que no puede ser distinguido el numero de cuerdas) como familia. Esta y otras pruebas dan peso a la teoría de que los miembros individuales de la familia de la viola surgieron hacia la misma época. No hay pruebas convincentes de que la viola (miembro alto de la familia) apareciese antes que el violín propiamente dicho, como se dice a menudo.
La madonna de los naranjos. Gaudenzo Ferrari, 1529.
Los primeros violines eran una mezcla de características de algunos instrumentos bien conocidos hacia el año 1500: el rabel, la vihuela de arco (fídula renacentista) y la lira da braccio (una forma desarrollada de la fídula). El violín combinaba la sonoridad y eficiencia de ejecución de la lira da braccio (cuyos aros intermedios hacían al instrumento más fácil de tocar con el arco que el rabel) con las ventajas musicales y la simplicidad de las tres cuerdas del rabel y de su afinación uniforme por quintas. Las violas de gamba, por otra parte, no son antepasados del violín en ningún aspecto decisivo de su construcción, afinación o técnica de interpretación. Mientras que el violín dejo anticuados a sus predecesores (el rabel y la lira da braccio), las violas de gamba sobrevivieron un siglo y medio después de la aparición del violín (es decir, hasta el final del siglo XVII, cuando las formas polifónicas, para las cuales las violas de gamba estaban más adaptadas, cayeron en el olvido). El bajo de viola, en su papel de instrumento del continuo y, en alguna medida, como instrumento solista, continuó floreciendo hasta mediados del siglo XVIII o un poco después.
Rebec
Nadie sabe quien inventó la familia del violín, y es muy improbable que lo hiciese una sola persona. Posiblemente ciertos constructores de Brescia como Giovan Giacobo dalla Corna y Zanetto Montichiaro estuvieron entre los gestadores del instrumento, ya que ambos fueron mencionados por Lanfranco (1.533) como constructores de laúdes, liras y similares. El primer constructor famoso fue, probablemente, Andrea Amati (nacido antes de 1.511 y posiblemente en una fecha tan temprana como 1.500-05), el fundador de la escuela cremonesa de construcción de violín.
Notas.
- Para más detalles sobre el rabel, ver el artículo de Remnant, Mary: «Rebec«, en L. Macy (ed.), Grove Music Online (última consulta: 6 de mayo de 2004).
- Para más detalles sobre la lira da braccio, ver el artículo de Mayer Brown, Howard & Sterling Scott Jones: «Lira da braccio«, en L. Macy (ed.), Grove Music Online (última consulta: 6 de mayo de 2004).
De la viola y otras cuerdas 